EL BÚHO

 Al vivir de noche y esconderse durante el día, el buho se asoció a la oscuridad, la noche, la tristeza, la soledad y la muerte. En China, en cambio, se la consideraba un ave sagrada, aterradora, representación del rayo, emblema de los herreros, consagrada a los solsticios de invierno y de verano, al renacimiento y al triunfo de la luz.
  

LA LECHUZA

Si llamamos así a esta especie de ave rapaz nocturna, sin duda es a causa de sus hábitos noctámbulos. La explicación tiene una base etimológica: en romance castellano del siglo XIII, el nombre de este animal era «nechuza» y derivaba del término aún más antiguo «nochuza». Según explicó el reconocido etimólogo J. Corominas, la palabra «nechuza» se alteró en lechuza por influjo de la superstición antigua de que la lechuza gustaba de echarse sobre los niños de teta como si los amamantara».
A la lechuza le gusta refugiarse en los campanarios de las iglesias, viejas granjas, graneros o ruinas, razón por la cual casi siempre se la representa solitaria y también causa por la que está desapareciendo poco a poco, al ser los graneros y los campanarios cada vez más escasos. 

 

HECHIZOS Y BRUJERIA 

La lechuza se asoció a la noche y también, por supuesto, a la Luna. De manera que para los aztecas, así como para los antepasados de la civilización inca, simbolizaba la Casa de la Noche, mientras que el águila, su opuesto, representaba la Casa del Día.
Cuando se representa a una lechuza como símbolo de adivinación o clarividencia, tenemos que distinguir la lechuza del autillo. La primera vela por los vestigios del pasado, por consiguiente, por el conocimiento y el saber ancestrales, los cuales este animal es susceptible de transmitir a quien le corresponda, mientras que el segundo tiene el papel de guardián de la noche, que protege al hombre de los demonios o le advierte si éstos se manifiestan o le ponen en peligro.

A los búhos y lechuzas se les empareja tradicionalmente con la sabiduría y la diosa Atenea, aunque los cuervos y otras aves comunes son más inteligentes. Sin embargo en numerosas culturas también se les atribuye aspectos negativos. Ejemplo de ello: En México al búho se le conoce como Tecolote o Teco derivada de la palabra nahuatl tecolotl y desde la epoca prehispanica era considerada por los pueblos indigenas como signo de la muerte y de los malos presagios, representando a varios dioses principalmente del inframundo en la mayoría de las culturas del México antiguo, incluso existe en México el refrán "Cuando el tecolote canta, el indio muere"; también en la cultura popular y el folclore de la mayor parte del territorio mexicano, se cree que las brujas por medio del nagualismo tienen la capacidad de tranformarse en búhos y lechuzas para "velar el sueño de sus victimas" durante la noche y potenciar el daño hecho por medio de su magia negra, además de utilizar esta forma para raptar niños los cuales sacrifican en honor a sus dioses o para robarles la energía vital, de esta creencia surge otro dicho popular que dice "se lo chupo la bruja", también se cree que cuando la bruja esta transformada en lechuza o búho emité unos agudos silvidos que si le son contestados con silvidos se le atraí y que puede alejarsele gritandole "ven por chile y sal" además de ser vulnerable a un exorcismo cristiano llamado "Las Doce Verdades"

-En el folclore de Chile y parte de Argentina, los búhos y lechuzas son considerados un tipo de "ave agorera" (ave de mala suerte)

-Entre los vascos, el búho es considerado un animal poco inteligente.

-En la cultura japonesa, los búhos son símbolos de la muerte y ver uno se considera de mala suerte.

-En la cultura rumana, y escuchar el sonido producido por estas aves es una indicación de que alguien va a morir en el vecindario, debido a que el sonido es parecido a un lamento.

-Los romanos los consideraban aves funerarias, por sus actividades nocturnas y por tener sus nidos en lugares poco accesibles, por lo que ver a un búho en el día se consideraba de mala suerte.

El búho, como colgante, es muy beneficioso para los estudiantes porque es símbolo de inteligencia, paciencia y sabiduría. Además, es el animal tótem de los videntes y de los psíquicos ya que vive de noche y se guía por su intuición. Además tiene un gran poder de visión, una gran conciencia de lo que tiene a su alrededor.
Posee la valentía de seguir sus instintos. Suele ser un buen compañero para una bruja o un mago. De hecho, en las culturas pre-colombinas, el búho era muy apreciado. Frecuentemente, encontramos su figura en cerámica y en metal. Era considerado un ser que ayudaba a los chamanes en sus viajes astrales. Representaba a las clases gobernantes y al mundo sacro.

 

El búho y la lechuza ven detrás de las apariencias, se mueven veloz y silenciosamente, son mensajeros de secretos y de premoniciones y son el enlace entre el mundo de la Luz y el de la Oscuridad. Representan la Luna, la libertad, las sombras. Su sonido se ha usado para alejar las tinieblas y los poderes de la oscuridad.

Resulta un talismán muy adecuado para los temas económicos. Si se está a punto de hacer una inversión o si se tiene algún problema de dinero, un amuleto en forma de lechuza te ayudará a seguir el camino adecuado.

Si deseas que tus ganancias se multipliquen, cuelga un pequeño adorno, como si fuera un móvil, en forma de búho en tu habitación.
Si precisas dinero a corto plazo, coloca, además, algo de dinero en el cajón de la mesita de noche o debajo de tu almohada. La cantidad no tiene importancia, es puramente simbólica. Lo que importa es que el amuleto se mueva, se balancee, para que sus vibraciones se expandan.